Hace mucho tiempo atrás... #01

Era una tarde de primavera, o quizas de otoño... no lo sé... la verdad mi memoria no es tan buena como para recordarlo todo... estaba sentado ahi, exhalando el humo de mi cigarrillo y maquinando una gran idea, algo que me sacaría de ese estado de pobreza mental y espiritual, o al menos me daría el dinero suficiente como para decir que esa sería una idea útil. Recuerdo que estaba a punto de tenerla, era perfecta, casi irreal, brillante, cuando de pronto de la nada, apareció ante mi ELLA.

No era nada espectacular supongo, no demasiado gorda ni delgada, una melena un tanto larga, ojos soñadores, aunque si, tenía algo especial: su sonrisa. Es como esas cosas que te parecen familiares de toda la vida, una sonrisa calida, como si se estuviera riendo de un chiste que le contó un duendecillo... de esos que no existen.

la miré unos segundos, y olvidé la idea, se perdió para siempre, quizas toda mi vida habría cambiado con esa idea en mis manos, pero mi vida había tomado otro rumbo. Aquellos ojos, aquella boca... eran al mismo tiempo mi perdición y el cielo, no sabía cual, no sé cual es ahora, pero en ese momento toda mi atención estaba puesta en ELLA.

Así mismo como apareció se fue, desde mi perspectiva, fué como una visión, en ese momento pensé: tendrá su vida y quizas nunca tenga oportunidad de conocerla, así que mejor lo olvido. Una tarde de otoño?... tal vez...

Recuerdo que en ese momento, el día se tornó bastante innecesario, estaba experimentando cosas nuevas en mi trabajo y en mis relaciones sociales, mucha gente nueva y poco interés me mantenían con una imagen de una persona fuerte y de carácter frente a los demás, lo que demuestra lo ilusa que es la gente.

El tiempo pasa rápido, normalmente, y el dinero viene y va, ya habían pasado un par de meses y mientras tomaba un capuccino barato en la cafetería de la esquina, solo escuchaba:

- Te digo que es una idea excelente, contratamos a estas modelos de bajo presupuesto y las hacemos trabajar como esclavas para promocionar el producto, barato, fácil y con resultados rápidos. - parecía que Daniel tenía un orgasmo con su propia creatividad prefabricada, alguien tenía que aterrizarlo

- Me parece una buena idea, pero lo cierto es que no tienes ningún concepto que vender, sabes... las modelos no van a vender el producto solo porque cobren poco y sean bonitas, supongo que tienes algún tipo de estrategia de respaldo o un plan de acción...

- Pero si todo se vende por si solo compadre, acá tenemos que generar plata rápido, te aseguro que esta idea vende, confía en mi - se la sacó debajo del sombrero demasiado rápido, según mis calculos simplemente estaba buscando apoyo para autoconvencerse y compartir la posible derrota... un problema.

- Según lo que veo no tienes idea de que quieres hacer, solo quieres usar a las modelos porque son el recurso que tienes más a mano... te diré qué: muestrame algo sólido, cualquier cosa, y las contratamos, pero no es fácil, quizas deberiamos considerar la televisión, quizás sea más caro pero es más seguro y llegamos a más personas, además ya estamos trabajando en un spot de 20 segundos, no creo que sea tan bueno improvisar ahora, de todas maneras no me parece malo como un plan de respaldo, de tener suficiente presupuesto para hacer ambas cosas.

- mmmh... me parece, creo que tienes razón, estudiaré el plan de acción con las modelos de todas maneras, por si se ocupan para esta u otra campaña.

Me salvé por poco, pero lo cierto es que estaba un poco aburrido de hablar del tema... me puse a sorber mi capuccino sin misericordia, para luego despedirme rápido con alguna excusa que me permitiera salir de ahi.

Las calles estaban frías y la gente se movia rápidamente, no esperaba que pasara nada interesante. Pasé por una tienda a ver algunas cosas, quería comprar algo, mi deseo consumista me dominaba, mientras veía el aparador, unos ojos brillantes me desconcentraron y ahi mismo lo sentí, esa sensación de estar mirando a alguien que cambiaría todo, un pequeño sol para un mundo sombrío.

Si no hubiera pasado por ahi ese día, si no hubiera sentido que no tenía sentido juntarme con mi compañero de trabajo, nunca la hubiera visto denuevo y su sonrisa sería simplemente un recuerdo que estaría escondido en lo más profundo de mi mente hasta que muriera, eso era un tanto magico y un tanto iluso... de todas maneras sabía que debía hablarle. me acerqué e intenté entablar una conversación de manera torpe. Ella estaba en sus propios asuntos, pero atendió a lo que decía y después de unos momentos nos hallabamos conversando sobre esto y aquello, sobre como recordaba haberla visto en aquella plaza y como ella tambien recordaba ese mismo momento. Así, nos vimos muchas veces, hablabamos del clima, de nuestros gustos, del día a día, y aunque todo parecía tan simple, adquiría un tono especial cada vez que lo hablabamos, un tono sephia... o tal vez solo café... o naranjo... quien sabe.

Pasaba el tiempo y lo supe, no era una amistad lo que estaba buscando... mi corazón estaba apuntandola... y que podía hacer yo? Me armé de valor y se lo dije, no sabía que más hacer... ella ya lo sabía... fué clara y concisa... ya estaba con otra persona... él estaba lejos, pero no por eso no estaba con alguien... pocas palabras... muchas emociones.

la conversación fué corta e intensa... nos despedimos y no parecía no haber nada claro... ella estaba con alguien, pero no estaba tan bien con esa persona... lo podía sentir... lo decidí, quizas iba a ser la unica vez en mi vida que hiciera esto pero... iba a luchar... iba a luchar por la persona que quería... nos juntamos otra vez, y volví a decirle lo que ya sabía, pero fué diferente, un momento eterno... corazones acelerados y un beso tan dulce como toda la miel del mundo... algo ilógico... pero emocionante... sentimientos de agua y viento... algo de otro mundo... hablamos de muchas cosas que ya no recuerdo... nos despedimos y estaba feliz, fué una de las pocas veces en la vida en que estuve feliz.

No duró mucho más, sonó el telefono y pegué un salto desde la cama, era mi jefe, necesitaba que le mandara urgentemente el teléfono de el mimo que entrevistamos el otro día... lo busqué y se lo dí mecánicamente... corté... estaba en la habitación solo... había sido un sueño... más que un sueño, un recuerdo borroso tal vez... estaba solo denuevo, pero recordar ese beso tan dulce... esos sentimientos tan puros e irreales... me hicieron sentir como si gentilmente me estuvieran abrazando... y al oido ELLA me dijera... "te quiero".